Speed Car es un desafiante arcade de conducción que nos situará en una carretera atestada de tráfico a plena hora punta. Afilando al máximo nuestras habilidades al volante y esquivando cualquier coche que pueda interponerse en nuestro camino, nuestro objetivo será el de intentar conducir la mayor distancia posible antes de que suframos una terrible colisión.
Las mecánicas de Speed Car son realmente sencillas: nuestro vehículo avanzará automáticamente a lo largo de la carretera y nuestro papel se reducirá al de modificar su posición sobre el asfalto, para lo que tan solo tendremos que arrastrar nuestro dedo en la dirección deseada. La velocidad de nuestro vehículo será constante en todo momento, aunque habrá situaciones en las que será necesario acelerar o disminuir la marcha; los pedales situados tanto a la izquierda como a la derecha de la pantalla serán los que nos permitan modificar estos parámetros pulsando ligeramente sobre ellos.
Además de los coches que deberemos intentar esquivar, la carretera de Speed Car también estará repleta de monedas que serán las que nos permitan aumentar nuestra puntuación máxima.
Aunque pueden echarse en falta una mayor cantidad de modos de juego o alicientes que fomenten la rejugabilidad, Speed Car ofrece una experiencia jugable lo suficientemente sólida y satisfactoria como para que valga la pena darle una oportunidad.
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